lunes, 16 de septiembre de 2019

Aparecidos













Fue un juego de manos, caricias en espejo sin tacto. Lamerse con miradas, rozar las espaldas en el vacío, hablar con la piel.

En las noches y en las siestas huían y se buscaban con un encanto magnético. Se sabían invisibles.

Foto: Kari Basanta

4 comentarios:

Jorge dijo...

Lindísimo poema.

Kari Basanta dijo...

Muchas gracias, Jorge.

sole dijo...

💕💕 Precioso

Kari Basanta dijo...

Gracias, Sole!!!! Qué sorpresa hermosa!!